Labios finos, labios carnosos, labios discretos, labios intensos… no importa cómo sean tus labios porque todos son bonitos y su belleza se puede realzar con color y brillo. Cada día, según como te sientas, elige el pintalabios que más te guste y sal a comerte el mundo y a iluminarlo con tu sonrisa y con tus besos.